Israel por siempre

Saturday, December 25, 2004

La persistencia del odio

En todo el pensar occidental, lo judìo resulta de una u otra manera, escamoteado, oculto, descalificado, transfigurado, silenciado. Esto representa ,consciente o inconscientemente un "odio inextinguible" ( Freud ) que se vuelca sobre los judìos a lo largo de los siglos.

Asì,la marca que el judaìsmo imprime en la historia de Occidente es incesantemente borrada.Impregna todo saber,pero no es sabido.Imprime direcciones, pero es distorsionado.Opera y produce en forma permanente a travès de los tiempos,pero es relegado al papel de reliquia.

Nada de lo judìo pareciera puede ser legitimado y expuesto directamente a la luz. Siempre a lo judìo se lo ha pretendido obligar al disfraz y a la apariencia.

Se tomò la Biblia hebrea y se intentò una traducciòn traidora."La apropiaciòn de una fe por otra, la conversiòn de una doctrina en un dogma que niega a la primera, el deseo de tachar el texto original para atribuirse la ùnica versiòn vàlida dàndole a la otra el caràcter de superada o maldita,sì ha dado origen a hogueras,matanzas,persecuciones,pogroms y exterminios"(Gerard Haddad).

Ningùn genocidio se lleva a cabo sin algùn tipo de aquiescencia, por no decir,complacencia de los aparatos de poder: de lo contrario, quienes tienen los medios para detenerlo,lo harìan.Claro que para detener el horror, ademàs de los medios, es preciso tener la voluntad y la decisiòn de emplearlos. Esta suerte de colaboracionismo pasivo, esta falsa inocencia, es otra de las expresiones que adopta el odio hacia lo judìo.

Es asì como Faraòn niega una y otra vez la realidad que tiene ante sus ojos,la extingue, hace como que no existiera. No es su corazòn el duro, sino su sentido comùn.

La negaciòn de lo judìo, que en el saber popular adopta estereotipos y formas de mito, aparece en el discurso ilustrado s`lo relegado a una funciòn de mero "antecedente".A un fòsil(Toynbee)o a un hecho històrico cuyo ùnico mèrito habrìa sido dar origen al cristianismo.Hay allì una intenciòn aniquiladora.

Lo judìo como fuente negada, a pesar de la negaciòn, sigue nutriendo la Historia. Alguna vez en el cruce de los caminos de la Historia, Occidente eligiò la herencia griega y tachò la judìa. Si Grecia es el ideal para el Occidente gentil, el antiideal es Israel. Para salvar a Jesùs debe hacèrsele griego.

Hasta Hegel, el odio al judìo se basaba en razones religiosas, teològicas,econòmicas, de costumbres o de ideas. Sin embargo,este antijudaìsmo se transformarìa con los conceptos biologistas de razas superiores e inferiores, en antisemitismo, lo que desembocarà en la mayor tragedia de Occidente,el Holocausto.

Al judìo se lo trata de convencer de que su redenciòn sòlo es posible por la vìa de la conversiòn al cristianismo. De hecho, la primera tarea del judìo renegado Saulo de Tarso (San Pablo) fuè establecer ràpidamente diferencias con la "vieja" fe. Para ello se dedica a tachar, descalificar y desautorizar palabras,ritos,tradiciones y creencias del judaìsmo; esta tarea de "hacerse un lugar",prosigue en los evangelios y aùn perdura.

El cristianismo opera un sincretismo entre lo griego y lo judìo. Vehiculiza los contenidos metafìsicos griegos e impone y difunde como monoteìsmo sus concepciones fundamentales.Tanto Grecia como Israel son distorsionados y reducidos al ser apropiados por el cristianismo.Pero, lo griego ha muerto, pertenece al pasado y al no poder disputar la autoridad y hegemonìa de lo cristiano, puede entonces ser glorificado por este. Lo judìo, en cambio, crece a la par. No asume la condiciòn de anterior. No se siente superado por el cristianismo, como este pretende (Viejo Testamento en contraposiciòn a Nuevo Testamento.Lo viejo, antiguo y caduco vs.lo nuevo, joven y actual). Esta indeclinable vigencia de lo judìo, es lo que hace que sea preciso acallarlo,desautorizarlo,difamarlo;llegando al extremo: aniquilarlo.Segùn Poliakov, el cristianismo necesita del judìo vivo,pero humillado,para demostrar su superioridad.

Sòlo muy recientemente la iglesia ha comenzado a revertir tal actitud, al menos en su discurso.Lo que sòlo confirma el muy prolongado desconocimiento anterior.

Cuando Nietzsche anuncia la muerte de Dios, se refiere al dios cristiano. Al dios que nace muerto, puesto que su divinizaciòn es producto y efecto de su muerte. Es el dios ya muerto desde siempre;el dios crucificado.En el cristianismo la adoraciòn de la divinidad es solidaria de la veneraciòn al Muerto.Paradòjicamente este mismo se disfraza de adoraciòn a la vida o a lo real. La sola formulaciòn del anuncio de la muerte de Dios,es de naturaleza pagana.Sòlo los dioses paganos nacen, mueren, pueden renacer y volver a morir.

El D's de Israel, no tiene comienzo ni fin. Es el D's creador del tiempo, dispensador de vida. D's viviente. No se constituye nunca como sujeto de un enunciado ni como objeto de un saber.Menos como una imagen o una idea. No se representa ni se tienen visiones de El. La profusiòn de imàgenes de culto, es màs una herencia pagana que judìa.El judaìsmo aborrece la idolatrìa.

Friday, December 24, 2004

La benevolencia del mundo para con los àrabes

Aunque la prensa contemporànea,teóricos y opinadores traten hoy de rehacer la Historia,los hechos del pasado no pertenecen a nadie en particular,estàn ahì y no cambiaràn.
Tomemos por ejemplo,la idea de la “ocupación” de tierras àrabes que desde 1967 los àrabes citan con particular insistencia exigiendo su inmediata rectificación a travès de la intervención de las N.U. y de U.S.A. Pero,lamentablemente,partición,disgregaciòn y pèrdida es la consecuencia natural de las guerras, y la Historia,para bien o para mal, no es amable con los paìses que atacan repetidamente a sus vecinos y ...pierden.
Que lo digan los alemanes,que tuvieron a su paìs dividido por 50 años o los japoneses que aùn después de décadas de haberse rendido todavía deben aceptar que los rusos ocupen parte de lo que fueron sus territorios. O los británicos,que conservan Gibraltar mucho tiempo después de haber vencido a la flota española.¿Y por què el mundo tiene que darle mucha mayor atención a los palestinos,que lo que le otorgan a los tibetanos,irlandeses o chechenos?. Siria por ejemplo,controla mucha màs tierra en el Lìbano que la que controla Israel en el west Bank.Sin contar que si los palestinos alegan una ciudadanìa de segunda clase en Israel,mucho peor la tienen en el Libano de donde fueron expulsados con violencia y a los que se quedaron se les niega empleo,salud y los servicios gubernamentales básicos.
Kuwait se librò de palestinos sòlo hace una década, para què decir Jordania que aniquilò a miles y los expulsò justo después de la Guerra de los Seis Dìas ( Septiembre Negro).En el paìs que fuera,los palestinos crearon serios problemas al gobierno establecido,por sus tácticas violentas,siendo echados de todos ellos. Antes de la actual Intifada,muchos màs palestinos buscaban trabajo en su odiado Israel que en su amado Egipto.
Me pregunto por què el mundo condena a otros terroristas que gustan de atentar con bombas contra civiles,llàmese irlandeses,vascos,etc y no a los palestinos.Ellos tambièn reclaman “ ocupación” de territorios,sin embargo, ninguno de los paìses afectados ha cedido a sus métodos de presión.Sòlo a Israel se le exige una conducta diferente.
Los voceros palestinos chillan por cifras de bajas asimétricas,como si la Historia le hubiera otorgado un capital moral a aquellos beligerantes que sufren mayores pèrdidas en una guerra.
Los americanos aprendieron muy bien en Vietnam y Mogadiscio que es difícil distinguir a civiles de soldados cuando los rifleros no usan uniforme y toman posiciones desde las ventanas de las casas.Ellos son realmente soldados cuando estàn vivos y matan como tales,pero de algún modo se cuentan como bajas “ civiles” cuando mueren como consecuencia del contrafuego.
En verdad,no se puede decir que esta guerra àrabe-israelì,al menos ,la cuarta desde 1948,està ocurriendo en el vacìo. Si se da en el West Bank es sòlo porque el teatro de operaciones cambiò luego de que el mundo àrabe perdiera las primeras tres guerras en que pretendiò destruir a Israel. Hace menos de dos años que Barak le ofreció a Arafat prácticamente todos los territorios “en disputa”con tal de firmar la paz.Nótese que digo,en disputa,y no ocupados.Pero este no querìa consegui9r sus fines por la vìa de una negociación.Querìa lograrlo por la fuerza.Su propio esquema y su Intifada le trajo de vuelta a su archienemigo ,Ariel Sharon.
En la guerra contra los terroristas,el pasado enseña que la paz viene como consecuencia de su derrota y no por negociaciones supuestamente “entre iguales”.
En todas las guerras que Israel ha sostenido con los àrabes,desde el establecimiento del Estado judìo,el temor de perder algo nunca ha sido fuente de preocupación para el lado àrabe.Ellos nunca seràn amenazados seriamente con sufrir algún daño si son derrotados,por que siempre confìan en la protección de la comunidad internacional. Cada vez que los àrabes han empezado a perder fuertemente en el campo de batalla,la comunidad internacional salta al medio,les ofrece su ayuda e impone el cese al fuego.
Es asì como para la nación àrabe,la guerra siempre ha sido jugar a ganador.Ganen o pierdan,se las arreglan para minar la determinación israelì y su imagen ante el mundo.Los àrabes que optan por el terrorismo,logran la inmunidad por la misma razón. No hay peligro de represalia masiva.Ellos saben que los judìos no van a matar a gente inocente. Se pueden mantener indefinidamente derramando sangre judìa sin temer la respuesta sobre su propia población civil.
Su política sobre Israel,descansa en que ellos sienten que su necesidad por esa tierra,justifica infligir cualquier tipo de daño para obtenerla ya que nunca van a tener que enfrentar la consecuencia de estas acciones.Tienen èxito sin aplicar ningún esfuerzo.No les importa iniciar guerras y perderlas,igual sienten que el mundo debe recompensarlos con la aprobación aunque sus métodos sean aborrecibles para cualquier hombre bien nacido.Si otros recurrieran a sus tácticas,no llegarìan a ninguna parte.Sin embargo,estos obtienen beneficios,sean cuales sean sus métodos.Incluso su importancia estratégica para el mundo radica en el petróleo que yace bajo su suelo,no a causa de algo que ellos produzcan con esfuerzo y trabajo o por el genio de sus ideas.Simplemente recogen lo que se les da gratis.En resumen,el èxito de que gozan los descendientes de Ismael,no es debido a ningún logro de ellos sino que por vivir en un mundo de pura benevolencia y del que sacan todo lo que pueden sin querer pagar ningún precio.
Esta benevolencia hacia los àrabes,parece estar ocultando algo,no parece sincera.Mi impresión es que màs bien disfraza una animadversión hacia el pueblo judìo.Hasta hace poco,causaba pudor declararse antisemita.Pero a escasos cincuenta años del Holocausto,el mundo ha ido dejando sus reparos de lado y cada dìa que pasa nos entrega nueva evidencia de que el antisemitismo sigue vivo,sobre todo en Europa y que aùn con disimulo,no pierde ocasión de manifestarse.
Nos tratan de hacer creer que esa tierra les pertenece y que no tenemos derecho de estar ahì. Increíblemente,incluso muchos judìos comulgan con esas ruedas de carreta.Olvidan que Eretz Israel fuè la patria de los judìos por siglos,hasta la destrucción del Segundo Templo. Los judìos no salimos de ella por gusto,sino que fuimos forzados a dejarla.Pero siempre dijimos que volveríamos.Los usurpadores que se asentaron en ella,lo hicieron bajo su propio riesgo.La reocupación de nuestra tierra no por demorar tanto,es menos legìtima.No hubo opciòn de lograrlo antes.
Tenemos el derecho de vivir en Israel,porque tenemos loa voluntad de sobrevivir como una nación distinta y de acuerdo a nuestras propias costumbres y creencias.Luchamos por nuestro derecho a sobrevivir como judìos.No tenemos por esto,ninguna obligación de justificarnos ni disculparnos ante nadie.No nos engañemos.El mundo no nos quiere.La benevolencia incondicional para con los àrabes es un reflejo de esta penosa verdad.Nada ha cambiado.

Thursday, December 23, 2004

El hombre que sòlo tenìa media cara

En los dìas del gran Êxodo,cuando los hijos de Israel atravesaban los desiertos entre Egipto y Canaàn escapando de los despiadados ejèrcitos de Faraón,habìa entre los errantes un hombre llamado Ajab.
Ajab era un tipo muy peculiar: rehusaba hablar la lengua de su pueblo, pero conversaba con sus vecinos de tienda, su joven hijo e incluso con los ancianos en el idioma de Egipto.
Era de naturaleza impaciente, descontento y lleno de quejas. Para si mismo decìase, “¿Què estoy haciendo aquì, entre estos esclavos fugitivos, toscos y harapientos que corren tras ese lunàtico de Moisés como un rebaño de ovejas?”.
A decir verdad no sòlo Ajab anhelaba volver a probar de las marmitas de Egipto;
muchos parecìan haber olvidado que entonces su alimento no lo recibìan en la libertad de sus propios hogares sino en los establos de los esclavos.
Ajab tenìa una queja en particular. Èl habìa sido un oficial del ejèrcito de Faraón encargado de los esclavos conductores de carros. Portaba un sello sobre una banda de metal que usaba sobre su antebrazo derecho, el que nunca se quitò durante todos los años de travesía con su parentela.
Una tarde en que se encontraba sentado delante de su tienda cavilando, le dijo a su hijo: “Nosotros no pertenecemos aquì,hijo mìo. No somos como ellos. No tenemos nada en comùn con los hijos de Jacob. Nosotros somos egipcios”. De esta manera le hablaba a su hijo en lo profundo de la noche.
Temprano en la mañana Ajab acompañado de su hijo se presentò ante los ancianos y les dijo: “En una hora me irè. Regreso a Mitzraim. Dejarè de ser un animal fugitivo como ustedes. Volverè a ser un hombre”.
En vano los ancianos trataron de disuadirlo apelando a su sentido del deber hacia los miembros de su tribu y a Israel. Finalmente uno de ellos exasperado le dijo a Ajab:
“Si retornas a ellos ,te repudiaràn. Si compartes sus tiendas , te señalaràn y te echaràn fuera. Si pretendes sus privilegios, te desdeñaràn. Y en los momentos de peligro, te dejaràn solo”. “Nunca podràs ser como ellos, porque no lo eres. Entre tù y ellos han fluìdo rìos de sangre derramadas por tu pueblo bajo el peso de sus espadas.No puedes escapar de ti mismo y salvar tu faz. Estando con ellos sòlo podràs vivir con media cara”.
A la mañana siguiente la tienda de Ajab estaba vacìa. Junto a su hijo habìa iniciado su marcha hacia el paìs del Nilo. Juntos viajaron muchos dìas,hasta que una tarde arribaron a las màrgenes de la tierra de las pirámides.Cuando Ajab y su hijo pusieron pie en el suelo egipcio tuvieron que vèrselas con la guardia militar, “ Yo soy Ajab, un egipcio, y estoy retornando a mi hogar, les dijo”.
Tan pronto hubo enunciado estas palabras los guardias comenzaron a chillar, dejaron caer sus armas y se perdieron aterrorizados huyendo hacia el desierto. El hijo de Ajab cayò de hinojos sollozando amargamente. Pues Ajab ahora sòlo tenìa media cara, media nariz, la mitad de sus labios, media barbilla , sòlo una oreja y un ojo.
Ajab se diò cuenta que la advertencia de los ancianos se habìa convertido en su maldición. Dejò a su hijo en el camino e iniciò su trayecto solo hacia el Nilo.Allì, en la ribera del rìo encontrò una caleta aislada en donde se construyò una cabaña de barro.Fabricò redes y trampas para coger peces y criaturas de la orilla,las que vendìa en la aldea vecina. Ellos le dejaban la paga en las rocas en donde èl depositaba su pesca ya que los aldeanos no se atrevìan a echar una mirada sobre su media cara.
Asì pasaron los años; Ajab se hizo viejo, la amargura se adueño de su corazòn y la soledad pesaba densamente sobre su alma.Sin embargo, aùn seguìa portando sobre su antebrazo los sellos del Faraón.
Una tarde, mientras se hallaba sentado junto a la ribera del rìo mirando hacia la lejanìa donde la luna parecìa tocar las aguas y las estrellas se percibìan tan cercanas que parecìan poder tocarse, la tristeza de Ajab se hizo màs fuerte; pensaba que su corazòn explotarìa de un momento a otro.Como en un sueño entrò a su tienda, cogiò algunas ropas de mujer que habìa guardado en un arcòn, envolviò el lino en su cabeza y cubriò su faz ,tal como lo hacen las mujeres cuando van al mercado.
Caminò muchos kilómetros hasta que arribò a la ciudad de Tebas,donde residìa el Faraón. Ya era casi de mañana cuando se viò frente a las murallas del palacio.Cerca del portòn principal notò un tumulto, los guardias del Faraón estaban arrastrando a un hombre ensangrentado hacia los portones . Ajab reconociò a este hombre como un judìo por la forma de su barba y su estilo de vestiduras. Con un sùbito impulso, corriò a travès de la explanada agitando su bastòn; pero antes de que pudiera golpear a alguno de los soldados uno de ellos disparò su lanza contra su pecho.Al momento de caer, el lino que cubrìa su rostro se desarmò ,dejàndolo expuesto. Asì quedò en el suelo yaciendo agònico.
Cuando el capitàn de la guardia se inclinò sobre el moribundo, Ajab le mirò y murmurò, “Hijo mìo, hijo mìo”.
El capitàn reconociò el sello de metal en el brazo de Ajab y miràndole el rostro sollozante le gritò: “¡Tù tienes nuevamente toda tu cara , padre mìo!”.
“Hijo- le dijo Ajab- la carne es dèbil y el espìritu es como el viento. Llèvame a la tierra de mi gente, para que mi alma pueda volver a encontrar la paz. Desearìa haber podido grabar en mi corazòn las palabras del príncipe Moisés ‘Y amaràs a tu D’s con todo tu corazòn y con toda tu alma y con todas tus fuerzas’.Y desearìa haber podido grabar en mi frente las otras palabras:’Yo soy el Señor, Tu D’s que te sacò de Egipto fuera de la tierra de servidumbre’”.
Asì muriò Ajab. Su hijo cambiò sus vestimentas y se preparò para tomar el camino a Canaàn. Embalsamò el cuerpo de su padre, como era la costumbre antigua, y lo puso en el lomo de su asno. Tomò dos trozos de corteza en las que grabò las ùltimas palabras de su padre moribundo y ciñò una con lazos de cuero al brazo izquierdo del cadáver, cerca de su corazòn y la otra, a su frente. Êl les llamò tefillin que significa en lengua egipcia” oraciones” o “canciones divinas”.A medida que se arrodillaba junto al cuerpo de su padre trataba de recordar las plegarias del anciano pero lo ùnico que venìa a su mente eran las palabras del servicio de los muertos: Yisgadal Veyiskadash…
Pasò que el hijo de Ajab logrò reunirse con su pueblo en Canaàn. El principe Moisés hacìa tiempo habìa fallecido pero Josué se conmoviò profundamente al conocer la historia de la vida de Ajab. Asì fuè como mandò un mensaje a todas las tribus y a sus ancianos:
“ La historia de Ajab es la historia de Israel. Que cada hijo, cada padre, cada anciano- cada sacerdote y juez y soldado- ate una corteza con las palabras del señor hacia su corazòn y en su frente, tal como lo hizo Ajab. Y que cada uno recite estas plegarias cada mañana bajo el peso de esta advertencia. Y frente a cada hombre que muera , que su hijo estè frente a su tumba o en la tienda de oraciòn y al amanecer recite ,por once meses y un dìa , las bendiciones del hijo de Ajab: Yisgadal Veyiskadash…”.
Asì se hizo, y se sigue haciendo hasta nuestros dìas .Y se seguirà haciendo por todo el tiempo por venir.

Sunday, December 12, 2004

Por què Israel no deberìa asociarse a la Uniòn Europea

Por què Israel no deberìa asociarse a la Unión Europea

El fin de la Guerra Fría se puede marcar históricamente con el desmembramiento de la Unión Soviética y la caída del Muro de Berlín. Este hito señala el comienzo de un distanciamiento entre EE.UU. y Europa, la que manifiesta un creciente antiamericanismo
que tiene su clímax en la ONU, a propósito de la decisión sobre la Guerra de Irak. Antiamericanismo que se expresa además, con un resurgimiento del antisemitismo europeo, disfrazado de antisionismo, bajo el pretexto de un apoyo a la causa palestina en el conflicto del Medio Oriente.
Para entender a cabalidad la compleja dinámica de estos procesos, debemos estudiar en profundidad los cambios que se están produciendo en Europa, especialmente con la configuración de la llamada Unión Europea.
Esta es la finalidad del presente ensayo.
Aunque en la práctica, los orígenes de la Unión Europea (UE) datan de la formación en 1951 de la Comunidad Europea del Carbón y el Acero, el concepto básico de que “Europa” es por naturaleza, un todo, y que debería ser gobernada por una autoridad mayor que cualquier Estado o gobernante individual, circula profundamente en la tradición de ese continente. De hecho, el concepto de Imperio en la forma de un poder supranacional puede ser trazado desde la época del mismo Imperio Romano. Los intelectuales europeos aceptaban la existencia de una forma de autoridad supranacional que unificaba a Europa. La palabra del Papa era vista como la última palabra de la cristiandad europea y las directrices papales no sólo influían en materias religiosas, sino también políticas. Es por eso que reyes y emperadores buscaban la sanción papal en sus guerras de conquista y dominio.
El Imperio de Carlomagno, incorporaba la mayor parte de los países que hoy conforman la UE, especialmente, Francia, Alemania, Italia y los Países Bajos. De hecho, Napoleón en 1804, estableció su propio Imperio, bajo el modelo de Carlomagno. No es casualidad entonces, que los promotores del Proyecto Europeo visualicen una Europa unificada teniendo a Carlomagno como precedente e inspiración. En verdad, anualmente se otorga el “Premio Carlomagno” a determinados individuos por su “meritoria contribución al servicio de la unificación europea”.y se entrega en Aachen (Alemania), antigua capital de Carlomagno (Aquisgran). Sin embargo, con la Reforma protestante y las Guerras de Religión que la siguieron, la aceptación de una Europa unida, declinó.
Con la Paz de Westfalia, que terminó con la llamada Guerra de los Treinta Años ( 1648 ) formalmente la autoridad supranacional se fragmentó, pasando a autoridades nacionales; permaneciendo este modelo hasta la fecha. Por supuesto, durante este período se funda la República Americana y bajo el modelo de la democracia griega. Pero el sueño de una Europa que aspira a principios políticos y culturales universalistas y cristianos, no estaba muerto.
La integración europea no es, por supuesto, un proyecto de la Iglesia Católica, pero la Iglesia ha demostrado un particular interés en que este lleve el sello de la cristiandad. De hecho ha presionado insistentemente para que este se integre literalmente al proyecto de Constitución europea. No se explica de otro modo, el hecho de que reiteradamente se le haya negado a Turquía, el derecho a formar parte de la UE. La República Turca a pesar de compartir geográficamente con el resto de Europa, es un estado secular, con una muy mayoritaria población musulmana. Europa no quiere más musulmanes en su seno (sólo Francia , cobija a 6 millones ).
Pero, ¿ qué tan democrático es este proyecto de la UE?.
El principal atributo del absolutismo es la iniciación y ejecución de políticas por iniciativa de una burocracia (elite) centralizada y que no está obligada a rendir cuentas. En la época del Absolutismo europeo este se caracterizaba por su creencia básica de que el buen gobierno debía ser un gobierno profesional en donde los expertos debían generar e implementar las políticas. Al contrario, las autoridades elegidas eran vistas como ineficientes, corruptas y peligrosas. Estos mismos conceptos priman en la elite gobernante europea actual y en sus instituciones.
Veámoslo en detalle. La UE tiene tres cuerpos principales que establecen sus políticas.
El Consejo de la Unión Europea (Council), compuesto por un representante de cada uno de los estados miembros.
El Parlamento Europeo, elegido por los ciudadanos de los estados miembros. Y la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE y para todos los propósitos, su cuerpo legislativo.
En teoría, la Comisión Europea rinde cuentas al Consejo y al Parlamento Europeo, sin embargo, ni el Consejo, ni el Parlamento, generan las políticas. Su poder es en la práctica, negativo, en el sentido que tienen la facultad de detener la aprobación de las políticas formuladas y adoptadas por la Comisión Europea, pero incluso esta función es implementada en la práctica, rara vez. Sin duda, la Comisión Europea es la institución más poderosa de la Unión Europea.
La Comisión Europea está formada por un Presidente ( Romano Prodi) y 29 miembros. Estos individuos son seleccionados por los estados miembros de la UE y están sujetos a un proceso de aprobación colectiva por el Parlamento Europeo. La Comisión Europea actúa como el brazo ejecutivo de la UE y es la verdadera fuente de sus iniciativas políticas y legislativas..
En áreas “competitivas”, como agricultura y políticas de comercio, es prácticamente autónoma. En otras palabras, este cuerpo no elegido por voto popular y para todos los propósitos prácticos, no fiscalizable, se ha embarcado en la creación de un Estado Europeo Unificado, en cuyo seno es el actor institucional, más poderoso. Ha llegado a señalar como el principal factor de éxito de la integración europea, su independencia y autonomía en el manejo de los fondos con que se maneja.
Esto revela cuán lejos el Proyecto Europeo se ha apartado del modelo de democracia norteamericana. La soberanía popular ha sido descartada..La ciudadanía ha sido transformada, de ser la fuente primaria de la legítima autoridad, a sólo uno de los peldaños iniciales, en el proceso de gobierno. En un intento de defender el carácter “democrático” de las nuevas instituciones europeas, los promotores destacan su compromiso con los valores de los derechos humanos y de igualdad; pero estos conceptos generales no pueden enmascarar el carácter absolutista de dichas instituciones. Por lo demás, el énfasis en la igualdad no se contrapone con la forma absolutista de gobierno. La igualdad ante las burocracias gubernamentales puede ser una herramienta muy útil para los gobiernos de elites.
¿Qué pasa entonces?. Lo que ya se ha visto, que Europa desafía a EEUU tanto ideológica como políticamente. En Setiembre 2000 la Comisión Europea instruyó al Parlamento Europeo señalando “nuestro objetivo debe ser hacer de Europa un actor global, con un peso político acorde con su fortaleza económica; un actor capaz de hablar con voz fuerte y de establecer una diferencia en la forma de conducir los asuntos mundiales”. Y , cuando Blair aceptó el Premio Carlomagno en Alemania, en Mayo 1999, expresó:”Para Europa el desafío principal ya no es sólo asegurar la paz interna en la UE. Es el desafío impuesto por el resto del mundo, acerca de cómo hacemos a Europa fuerte e influyente, cómo hacemos un uso total del potencial europeo para ser un poder global, para el bien”.
Europa quiere promover su modelo social y político como la base de un nuevo sistema internacional. Dijo Romano Prodi en Abril 2000,” necesitamos un nuevo orden mundial, un nuevo sistema de gobierno global para Europa, con sus valores éticos y políticos distintivos, debemos jugar un rol de liderazgo en este nuevo sistema”. De ahí viene el desafío a EEUU al criticarlo abiertamente por no integrarse en los Protocolos de Kyoto (sobre los cambios climáticos globales) y la Corte Penal Internacional.
Los políticos europeos entonces, no han tenido ninguna reticencia a criticar vigorosamente virtualmente cada aspecto de las políticas norteamericanas, tanto domésticas como de exterior; desafiando los principios básicos del gobierno y la sociedad americana.
Las diferencias fundamentales entre Europa y EEUU sobre la conducta a seguir en los asuntos internacionales ha generado choques y tensiones que es probable persistan bajo cualquier administración en Washington, sin importar si los gobiernos europeos sean más o menos pro-atlánticos.
Esta época forjadora de eventos está remeciendo las relaciones de poder a nivel mundial y llevando a nuevas alianzas y lineamientos en los estados europeos. Un punto clave de esta hostilidad es la actividad creciente de la UE por transformarse no sólo en un poder económico mundial, como lo es actualmente, sino también, en un actor mayor como poder político y militar. Para esto ha hecho ingentes esfuerzos por incorporar 10 nuevos países a su órbita, expandiéndose más allá de lo que era la Cortina de Hierro, hospedando a 8 nuevos países de Europa Central y Oriental más Chipre y Malta.
El éxito de este esfuerzo integrador y la introducción del euro como moneda común, han hecho pensar a los europeos que ellos están en ascenso en el control de los asuntos mundiales. La idea de fondo es proveer a la UE con un único Primer Ministro y un Presidente fuerte que sea capaz de representar los puntos de vista de la UE ante el resto del mundo. Sin embargo, no todos los países dentro de la UE tienen el mismo peso. Francia, Alemania, Bélgica y Luxemburgo han constituido un cuarteto que parece dominar sus políticas, y que han demostrado con mayor fuerza su oposición a Washington. De hecho, en el centro de toda esta agitación, se encuentra Francia. El único poder moderno, aparte de EEUU, que cree ser poseedor de valores universales que merecen ser exportados al resto del mundo, en una visión moderna del clásico colonialismo francés en su “mision civiliza trice”.
Los públicos choques que ha tenido Francia con la administración Bush en la primera mitad del 2003, tuvieron lugar en el seno del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ( en donde Francia es uno de los cinco miembros permanentes ,con derecho a veto), y en la OTAN, institución que Francia ha considerado siempre como una herramienta al servicio de la dominación norteamericana.
Cuando Chirac hace un llamado en pro de un mundo multipolar, no está pidiendo más poder para China, India o América Latina, sino que para una Europa cortada a la medida de los intereses franceses. Esta es la razón por la cuál París ha tratado tan activamente de reinventar el eje Franco-Alemán. París siempre fue capaz de ejercer una influencia dominante sobre la comunidad de 6 naciones que formó junto a Alemania en 1950 (Francia, Alemania, Italia y los tres países del Benelux, Bélgica, Luxemburgo y los Países Bajos) . Entonces los alemanes estaban aún desesperadamente necesitados de rehabilitación moral y política y dedicada principalmente a reconstruir su economía manteniendo sus cabezas bajo el parapeto internacional. Aceptaron impulsar la integración europea a medida que mejoraba su poderío económico, dejándole el liderazgo político de ella, a Francia.
A Inglaterra se la mantuvo esperando fuera, condenada como un caballo de Troya norteamericano.
Un elemento esencial que ha permitido el dominio francés, ha sido el rol que París se ha autoasignado, como árbitro de los valores europeos y ha llegado a imponer su idea de que el resto de los países de la Comunidad son europeos sólo en la medida que sigan las directrices francesas y que preferentemente, hablen francés; por eso Inglaterra es vista como “ no totalmente europea” pues conserva muchas ataduras con el mundo anglosajón.
El principal empeño diplomático francés es usar a la UE como una fuerza multiplicadora de su influencia tanto en Europa como en el resto del mundo, utilizando como herramienta principal a las Naciones Unidas, en donde pretende llevar la voz cantante. En alguna ocasión Chirac señaló: “Europa no es un continente, sino una idea”. Debía haber agregado, “una idea francesa”. Es notable cómo Chirac se las ha arreglado para impulsar la integración europea con un carácter supranacional, como una herramienta de la política francesa, manteniendo sin embargo a Francia, con un particular carácter de país soberano e independiente.
El creciente antiamericanismo además, ha ayudado a la causa francesa. A medida que se profundizó el choque entre Francia y USA a propósito del asunto de Irak, Alemania se alineó con Francia en contra de EEUU, por primera vez desde la 2ª. Guerra Mundial, dándole a Francia una valiosa cobertura política para su postura anti norteamericana.. Gran Bretaña, por otra parte, no será capaz de participar de lleno en ningún grupo de poder que pueda definir el futuro de Europa, simplemente por su ausencia de la euro-zona, lo que impide su integración económica completa con el sistema. Gran Bretaña podrá tener una mayor influencia en defensa y política exterior, pero difícilmente entrará a conformar el grupo París- Berlín, que domina la Europa altamente centralizada. Su apego a EEUU y a la OTAN , no le permitiría acoplarse a ninguna iniciativa de defensa europea independiente.
Durante la Guerra Fría, los EEUU se valieron de la OTAN para proveer la fuerza militar y política que frenara el expansionismo soviético. Esto permitió que la Comunidad Europea se desarrollara económicamente y proveyera prosperidad y una red de justicia social que fortalecería a la sociedad europea occidental en contra del comunismo, tal como lo hizo Japón en Asia. Se veía entonces a Europa como un poder económico y a USA como un poder global, militar y político. De hecho, las sucesivas administraciones americanas promovían esta complementariedad. Kennedy, por ejemplo, oficialmente propugnaba la integración política europea, pero reservadamente entendiéndose que los intereses norteamericanos se verían mejor servidos por una Europa que siempre estuviera luchando por una mayor integración , sin llegar a concretarla en la práctica.
Desde el principio, la unidad europea fue entendida, especialmente a los ojos franceses, como un contrapeso a la hegemonía global de EEUU. El cálculo era bastante simple: ningún poder europeo podría tener la esperanza siquiera de aproximarse al poder, riqueza y población norteamericana. Incluso Alemania, con todo su poder económico, contaba con una población de sólo un tercio de la de EEUU. Una nación como Francia, con una antigua tradición histórica de influencia global y una historia reciente de humillación militar, aspiraba a recuperar, con el proyecto europeo, lo que una vez perdió.
Desde 1957, con el Tratado de Roma, una interminable serie de tratados, leyes e instituciones, han acelerado la tendencia integracionista. En los 80s, las reformas al Mercado Común Europeo. En 1991 el Tratado de Maastricht. Los Estados miembros han ido cediendo progresivamente, igual que un salami, trozos de soberanía nacional.
No sólo han ido desapareciendo particularidades de tarifas y aranceles, sino también leyes nacionales que no sean compatibles con las directrices emanadas de la Comisión Europea. La Corte Europea de Justicia, se ha transformado en la última instancia para muchos casos judiciales, sobrepasando la competencia de los jueces nacionales. Y luego, por supuesto, sigue la rendición de las monedas nacionales y gran parte de las particulares políticas fiscales, al Banco Central Europeo, coronados por la introducción formal del euro en el 2002. Ya es imposible para los países europeos integrados, tolerar déficits fiscales fuera de los límites prescritos por la UE; no controlan sus tasas de interés ni pueden usar la devaluación de sus monedas para flexibilizar la economía. Aún el Presidente de la Comisión Europea carece del aura de protagonismo que tiene, por ejemplo, el Primer Ministro británico o el Canciller de Alemania. El Parlamento Europeo, un cuerpo elegido, en la práctica figura muy poco y carece de verdadero poder.¿Cuál sería la solución?: una Constitución europea, el escalón final para la conformación de un Estado Federal Europeo ( unos Estados Unidos de Europa ). ¿Quién coordina y está a cargo de la ejecución de este proyecto?....el ex presidente de Francia, Valery Giscard d’Estaing.
Actualmente la presidencia de la UE rota cada 6 meses con cada país teniendo la posibilidad de representar al grupo de 25. Bajo la proposición de la nueva Constitución esto cambiaría a designar un presidente único, casi con certeza, de uno de los países más importantes: Francia, Italia o Alemania, que serviría por un término de dos y medio años. También se designaría un único Ministro de Relaciones Exteriores para conducir la política exterior de los 25 miembros. Por mucho escepticismo que manifiesten los países recién entrantes, al final terminará por imponerse el sueño federalista de un Estado europeo único. Ya lo dijo Romano Prodi, “ la aspiración es a un gobierno único para todos los países con una moneda común”.
Aunque Francia y Alemania no tienen la capacidad militar para rivalizar con EEUU, sí tienen un considerable peso en la esfera diplomática. De hecho, utilizaron a la ONU en su favor, le encarecieron la guerra contra Irak a EEUU y a la larga unificaron a la opinión mundial en contra de la guerra y en contra de USA.
En el caso inglés, la capacidad de Londres de seguir apoyando la política americana en contra del resto de los países europeos puede llevar a la marginalización de Inglaterra dentro de la UE, con todos los costos que eso podría significar. Recordemos que Blair estuvo a punto de perder su cargo en su afán de desafiar el consenso europeo. La única manera de cambiar el centro de gravedad franco-germano sería si otro poder europeo se aliara con Alemania, excluyendo a Francia. Lo que no parece factible. Blair trató de levantar un eje anglo-germano y a sus espaldas el canciller Schroeder y el presidente Chirac acordaron subsidios sobre materias agrícolas que dañaron a Blair significativamente.
Está claro que en el próximo conflicto global Francia se encargará que los primeros ministros de Inglaterra, España o el presidente de Polonia, no puedan hacer acuerdos separados con EEUU. De concretarse el proyecto de Constitución europea, USA tendrá que contactar al Presidente de la UE en Bruselas.
Retomando el principio de nuestro ensayo quizás ahora tengamos más elementos para entender la compleja dinámica que está llevando a un resurgimiento del antisemitismo en Europa y a la obsesión de la ONU por decretar una y otra vez resoluciones en contra de Israel y su política en Medio Oriente.
En estas pruebas de fuerza entre Francia y EEUU, el conflicto del Medio Oriente es el escenario ideal que Chirac utiliza para inclinar la balanza a su favor. Israel visto como aliado y protegido de USA aparece como el objetivo más atacable y más débil sobre el cual ejercer presión. Si Israel logra ser doblegado, por extensión se interpretará esto como un triunfo de la coalición europea sobre EEUU. En esta lucha de poderes importa poco la justicia de la reivindicación israelí, los derechos humanos de los judíos y la causa de la democracia.
Cuando escuchamos voces que propugnan la incorporación de Israel a la Unión Europea no podemos dejar de sentir desazón. Europa y especialmente Francia ha demostrado ser visceralmente judeofóbica. La Historia pasada y reciente así lo demuestra. No cabe duda que Israel , entre dos contrincantes, debe seguir alineado con el que le ha apoyado mejor, con EEUU.